Internacionalización: Internet da rienda suelta… a tu empresa

Posted by Mamen Jiménez on oct 10, 2013 in Social Media | 3 comments

Todos sabemos que hoy en día, internet ha supuesto una revolución para el ser humano en muchos aspectos. Abre todo un mundo de posibilidades a nivel profesional y a nivel personal.  La globalización, que ya era un hecho con la liberalización de la economía mundial, se ha visto enriquecida por la aparición de este nuevo canal, que nos permite movernos “a nuestras anchas” por cualquier rincón del planeta.

La posibilidad de que hoy una empresa no esté presente en este nuevo medio de comunicación e información es, para muchos de nosotros, algo impensable. Existe la eterna pregunta de cualquier empresario de si es bueno tener presencia 2.0, pero vamos a dar por hecho que todas las grandes corporaciones ya establecidas y todas las pymes que sobreviven y que comienzan su andadura en el mercado, ya contemplan esta idea como algo que impera en la actualidad. No se trata del debo o tengo que estar, sino el quiero, por todas las ventajas que ello supone, que son muchas.

¿Por qué es bueno internacionalizar mi empresa?

 

Hay muchas razones por las que deberías considerar hacerlo, pero las más importantes responden sobretodo a si tengo nicho de mercado, si el servicio que presto o el producto que vendo, tiene un carácter global, si puede satisfacer la demanda de cualquier persona en cualquier parte del mundo o en países más concretos que tú determines como mejores opciones.

Algo importante que una empresa gana si decide apostar por este proceso es la supervivencia. Sí, la supervivencia. Aquellas que deciden lanzar sus productos más allá de las fronteras de su país, tienen más opciones de sobrevivir a periodos de profundas crisis económicas. Apostar por regiones en las que la economía se mantiene estable y el consumo no desciende, o incluso por países emergentes, puede equilibrar la balanza si en tu país, en este caso España, no puede hacer frente a tu oferta. Muchas corporaciones se mantienen precisamente gracias a eso, a que sus negocios en Suiza, Inglaterra o Japón van tan bien que sostienen la decadencia que vives en tu país. La empresa no naufraga.

 

Pero, ¿qué puede aportarme internet a mi internacionalización?

 

Muy especialmente, información. La información es poder. Es la parte que estamos olvidando destacar ahora que todo el mundo tiene en la boca la comunicación, generar engagement, dirigirte y entablar relaciones con tu público objetivo. Vamos a dar un pasito “atrás”

Desde mi punto de vista, internet te posibilita:

• Realizar un estudio más exhaustivo de la situación macroeconómica de un país, desde documentos oficiales, a opiniones en artículos, a noticias de actualidad e, incluso, a conversaciones de gente “de a pie” que habla en foros, blogs, etc. Saber si es o no un país solvente.
• Observar comportamientos del mercado en aquel país al que te quieres dirigir. Saber si se demanda el servicio o producto que quieres ofrecer, si tendrías mucha competencia o no, si se trata de un sector en auge o en pleno boom, si, en definitiva, tienes hueco y nicho de mercado.
• Puedes acceder a información legal o política para conocer las trabas o dificultades que tendrías al emprender allí, algo que parece superfluo pero que no lo es. Barreras a la entrada o salida, que luego llegan las sorpresas y nos damos cabezazos preguntándonos por qué no lo hicimos antes.
• Y todo esto, a coste muy económico. Internet abarata costes y permite plantearnos este tipo de acciones sin una excesiva preocupación por la inversión inicial. Sin darte cuenta, los propios usuarios estarán moviendo tu producto o servicio sin control. Los riesgos de perder lo invertido disminuyen considerablemente.
• Dispones de nuevas formas de asociación entre empresas o nuevas vías de (auto) financiación, como crowdfunding, una nueva forma de recaudar dinero en masa con la ayuda de personas que creen en tu proyecto, en tu idea. Internet, como medio de masas e “infinito”.
• La aparición de nuevos y renovados equipos y medios tecnológicos que surgen cada día facilita la interacción del usuario con tu negocio. Ya ni si quiera es una barrera estar fuera de casa, pues con las tablets y smartphones, pueden acceder fácilmente a tu página de empresa y a tu tienda online… Lo que nos lleva a hablar del REY!

 

Y el rey, la aparición del todo poderoso e-commerce

 

El comercio electrónico, o e-commerce, ha supuesto una ampliación de miras para la empresa a nivel geográfico. Ya no existen barreras para vender tus productos en cualquier parte del mundo. Las limitaciones a nivel físico desaparecen y son accesibles para cualquiera, aunque tu empresa esté en Madrid y quieras vender en Nueva Zelanda. Ese problema desaparece. Ahora existe la posibilidad de ser omnipresente.

La atención al cliente se amplía a 24 horas al día los 7 días de la semana. No hay problema de horarios. Una persona en Nueva York puede entrar en tu tienda a las 8 de la tarde y aquí ser las 2 de la mañana, pero nuestra tienda esta “opened” para todo el público.

Los costos de mantenimientos no varían, son fijos, pero si consigues un buen posicionamiento y tienes una buena estrategia de SEO, de comunicación en redes, un buen estudio de mercado en mano, tus ventas seguro que se incrementarán. No hay magia; los precios, la calidad de los artículos, los costes de los gastos de envío e, incluso, la estética y navegación por tu página serán motivo de variación en los resultados. Eso ya queda en ti 😉

Además, internet permite al usuario obtener información previa de tu producto o servicio sin sentirse presionado por la compra final, pidiendo referencias sobre ellos sin moverse del sillón y por diferentes canales.

 

Por último, pero no menos importante…

 

Si decides internacionalizar, después de un estudio, análisis, y razonamiento lógico (o no), que no se te olviden dos detalles:

1. Que seguirás teniendo competencia porque surgen más empresas que ofrecen servicios online, por lo tanto no dejes de reinventarte y buscar esa diferenciación que debe tener tu negocio y…
2. TRADUCE AL INGLÉS TU PÁGINA COMO POCO… Añade idiomas según te vayas dirigiendo a países concretos: chino, alemán, italiano o francés… siempre que tus posibilidades te lo permitan.

 

 

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