Mamá de mayor quiero ser Influencer

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La verdad es que no me apetecía seguir metiendo caña, porque al final me voy a crear más enemigos de los que me gustaría tener dentro del mundo del Social Media. Pero como me debo a mi público y me lo habéis pedido, aquí tenéis un post sobre los “queridos” influencers. Dentro de este saco de “influencers” me gusta meter a toda la fauna relacionada, es decir, gurúses, apasionados de…, etc.

El tema de los influencers me recuerda mucho al cuento de “El flautista de Hamelin”, por si alguien no lo conoce, en el cuento hay un flautista que cuando toca la flauta las ratas le siguen. Yo de pequeño pensaba que en este cuento el flautista no era especialmente bueno, pensaba que el problema era de las ratas que eran gilipollas. Bueno pues con los influencers lo mismo, cambiamos flautista por influencer y a las ratas por los acólitos que van detrás de ellos. (No me malentendáis, no estoy llamando rata a los que van detrás de un influencers, eso viene luego pero prefiero utilizar otro animal).

Convertirse en influencer en el mundo del Social Media no es complicado, hago la aclaración sobre el mundo Social Media, porque en otros ámbitos en los que hay más profesionalidad no es tan sencillo.

Únicamente tendríamos que seleccionar una o varias de las ideas que os voy a contar a continuación y trabajar en ellas, el resto irá llegando.

  • Publica contenido todos los días, da igual que sean traducciones de otros posts, o que empieces diciendo que lo has leído en X y te ha inspirado para escribir tu post. Lo importante es la cantidad, satura tu blog y las redes sociales con contenido “propio”.
  • Crea plantillas y tutoriales a cascoporro. A la gente no le gusta mucho pensar no complicarse, ni siquiera buscar en Google. Les gusta más que les des el pez y si no saben pescar da igual con tu pez tienen de sobra.
  • Hazte amigo de otros influencers, si, en plan peloteo, hacerles RT, ir a verles a eventos, llevad una foto suya en la cartera. Nunca se sabe pero si estás cerca de ellos, es posible que en algún momento te van a considerar parte de su equipo, te van a invitar a dar un curso con ellos, o te van a llevar de la mano a uno de esos eventos.
  • Haz listas de influencers en tu blog, esto mola, es una aplicación práctica del yo te rasco la espalda y ya me pondrás tú en tu lista cuando la publiques.
  • Diferénciate, pero te compliques e intentes diferenciarte bien, intenta llevar la contraria o meterte mucho con alguien, que siempre hay gente que piensa lo mismo que tú y la unión hace la fuerza.
  • Posturea, posturea como si no hubiera un mañana, acude a eventos, hazte runner, toma gin-tonics, crítica a los que se hagan fotos de los pies, etc., la clave es aparentar.
  • Empieza a hacerte el digno (o digna), en grupos de Facebook, Linkedin y demás como si la conversación estuviera por debajo de tu nivel.
  • Programa tuits, enchufa un RSS a tu cuenta de Twitter publica automáticamente todo lo que salga de la boca de Puto Marketing, no te preocupes por saturar a la gente, te lo agradecerán.

Aunque esta lista podría ser interminable, creo que tenemos para ir empezando, seleccionad varios de los consejos y dedicadle tiempo y ganas, quien sabe si dentro de poco tiempo necesitareis una americana con coderas para ir a dar charlas…

Ahora en serio y sin sarcasmos, o con algunos menos que antes, fijaos en los influencers que vemos en listas o luciendo palmito en eventos y veréis que la mayoría encaja en alguno de estos consejos. Pero el problema, (desde mi punto de vista), no son los influencers, el problema real son las personas que van detrás de estos influencers.

Antes comentaba que en otros sectores es más complicado hacerse influencer, y la razón es que en otros sectores hay más profesionalidad que en el nuestro. Nunca veremos a un médico preguntando en un grupo como se ausculta a un paciente. Cosas de primero de medicina, que todo médico debería saber, pero que en nuestro sector da igual no saber, pregunto y que me solucionen la papeleta.

Yo que no soy mecánico, puedo preguntar cómo se cambia una rueda, pero un mecánico de verdad nunca va a preguntar algo así y aquí está la clave, igual que un mecánico de verdad no pregunta determinadas cosas, un social media de verdad no debería preguntar ciertas cosas.

Antes ponía el ejemplo del flautista y las ratas, yo no quiero llamar a nadie rata, pero sí que quiero utilizar la palabra borrego.

Los borregos son la principal causa de que estemos saturados de influencers, sin gente que consuma plantillas, que te haga de acolito en un evento, que se incluya en sus listas, que te ría las gracias, no tendríamos influencers, y trabajaríamos mucho mejor.

Por cierto, antes de terminar me gustaría deciros que tenéis mi permiso para criticarme y tirarme piedras si alguna vez me convierto en un influencer, aunque por el camino que voy en este plan de hacer amigos, no creo que pase.

Imagen destacada: Pixabay

Ahora mismo trabajo como consultor freelance sobre Marketing Digital y Social Media, sí, otro más, pero no otro del montón 😉

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Jose Humanes (7 Posts)

Ahora mismo trabajo como consultor freelance sobre Marketing Digital y Social Media, sí, otro más, pero no otro del montón ;-)


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